¿Qué es el Design Thinking?

A lo largo de la historia del desarrollo de productos y servicios, surgieron diferentes métodos y técnicas para mejorar los procesos, optimizar los recursos y medir la viabilidad de los proyectos, uno de ellos es el Design Thinking.

En el mundo del UX, el desarrollo de un producto siempre depende de la investigación previa y sus hallazgos, lo que las personas usuarias dicen u opinan sobre el problema que se está tratando de resolver y de sus preocupaciones, y cuando ya conocemos ese contexto, entonces podemos comenzar a crear.

Es aquí donde entra el Design Thinking o pensamiento de diseño en español, un proceso que busca entender la complejidad de un problema desde diferentes perspectivas, no solamente desde el diseño, también a nivel de negocio.

El término fue acuñado por primera vez en 1969 por Herbert Simon, Premio Nobel de Economía, en su libro “La ciencia de lo artificial” aunque fue Tim Brown, CEO de IDEO y profesor de diseño en la Universidad de Stanford, quien lo retomó y lo impulsó en las nuevas generaciones de diseñadores.

Este proceso se compone de 5 etapas principales más la implementación e iteración, aunque ésta última está presente durante todo el proceso.

Etapas del Design Thinking

1.- Empatizar: explorar, escuchar, observar, investigar… la primera etapa implica conocer el contexto del problema y extraer todos los datos que guiarán el desarrollo del proyecto.

2.- Definir: encontramos las necesidades, identificamos puntos clave, exponemos los hallazgos y los reconocemos para darle forma al planteamiento del problema.

3.- Idear: desarrollamos las primeras soluciones, hablamos en equipo para intercambiar ideas y comenzamos a definir nuestra propuesta de valor.

4.- Prototipar: es el momento de crear prototipos para validar las ideas y las conclusiones preliminares de las etapas anteriores, sobre todo, su viabilidad.

5.- Probar: comprobamos o descartamos el funcionamiento de las ideas materializadas, con personas usuarias reales que nos den su retroalimentación al interactuar con el producto o servicio desarrollado.

• Implementar: esta es la fase final en la que después de todos los aprendizajes que obtuvimos en las etapas anteriores, lanzamos el producto o servicio final.
• Iterar: más que una etapa, la iteración es parte de todo el proceso, ya que constantemente nos tenemos que cuestionar lo que estamos haciendo para hacer cambios. Recuerda: “falla rápido, falla barato”.

Aunque últimamente más personas conocen el pensamiento de diseño como parte del mundo del diseño UX/UI, este proceso no es solamente para los diseñadores, se trata más bien de un recurso pensado para que quienes normalmente se encuentran del lado del desarrollo, se acerquen al pensamiento empresarial y estratégico de las ideas.

Colaborar e integrar diferentes disciplinas nutre los proyectos, además es un punto de encuentro de perspectivas, problemas nunca pensados y soluciones únicas.

Aprender sobre la práctica

En este 2020 decidí probarme a mí misma y empecé a aprender diseño desde cero. Afortunadamente, quienes colaboramos en BEDU, tenemos como beneficio el poder inscribirnos a cualquiera de los cursos que impartimos y me anoté a Diseño UX/UI.

¡Ha sido un gran viaje! Aquí es donde entendí mejor el lado del desarrollo del producto, las implicaciones del diseño y claro que tuve que desarrollar un proyecto propio utilizando metodologías como el Design Thinking.

Si a ti también te gustaría aprender, cada mes tenemos inicio de curso, incluso uno de Principios de UX, módulo en el que vemos estas metodologías y tienes la oportunidad de trazar un proyecto personal para aplicar lo aprendido.

¿Qué opinas sobre esta forma de desarrollar productos, pensar diferente y trabajar en equipo? ¡Escríbeme qué te pareció!